Contratos contra el Estado: el rentable negocio energético de Fredy Nasser
De los cerca de $990 millones que la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) pagó en 2019 a las generadoras privadas, sólo las empresas del Grupo Terra, que pertenece a Fredy Antonio Nasser Selman y su familia, recibieron la tercera parte, $327 millones, es decir, más de 7,000 millones de lempiras.
Donde se genera energía está Nasser. Posee plantas de electricidad renovables y térmicas y la ENEE, es uno de sus principales clientes. En 23 años, sus empresas han suscrito más de 20 contratos. Sólo por 11 de ellos cobró de enero de 2019 a julio de 2020, cerca de $434 millones (más de 10 mil millones de lempiras).
Carlos Molina, secretario municipal en San Marcos de Colón, habla de su pueblo como uno de los más hermosos de Honduras, con un paisaje seductor y gente cálida. Y además está situada en un lugar privilegiado por el viento, algo que aprovecha la empresa privada.
Carlos recuerda que, hace seis años, la industria energética tocó las puertas del municipio. “Lo hizo sin consultarle a nadie, como es su costumbre”.
En realidad, era un mandato del Congreso Nacional, que aprobó dos contratos de generación eólica, con Vientos de Electrotecnia (VESA) y Vientos de San Marcos (VESAM), ambas del Grupo Terra. Nasser es uno de los hombres más ricos de Honduras, con inversiones petroleras, inmobiliarias y energía.
Contratos salpicados por irregularidades
Carlos atendió a Radio Progreso en el salón municipal. Desde allí recordó cuando les notificaron que en San Marcos se instalarían varios parques eólicos.
“Nosotros buscamos un acercamiento con la empresa para negociar condiciones óptimas para el municipio. Nunca recibimos una propuesta que satisficiera nuestros intereses”. Los ejecutivos de este grupo nunca accedieron a las propuestas municipales.
Amparados en ley, los contratos renovables disfrutan de exoneraciones fiscales. “Si no estuviesen exonerados, deberían pagar a la municipalidad más de 3 millones de lempiras anuales solo por permiso de operación”, explicó Molina.
Ambos proyectos cobran a la ENEE cerca de $64.4 millones al año.
“De pronto llegaron los ejecutivos con el decreto en mano, nos dijeron que no pagarían impuestos porque la ley los amparaba”, declaró Molina.
En realidad, los contratos eólicos firmados por estas empresas no solo se beneficiaron de exoneraciones fiscales, también recibieron tratos preferenciales que fueron cuestionados por una auditoría del Tribunal Superior de Cuentas (TSC), que señala directamente a las eólicas VESA y VESAM y a la térmica ENERSA, también propiedad de este grupo.
La ENEE suscribe acuerdos que atentan contra su situación financiera. Por ejemplo, la Ley de Contratación del Estado le permite que, en caso de mora, pague intereses hasta después del día 45 de atraso. Sin embargo, estos contratos obligan a la estatal a cancelar intereses desde el día 8 y 10. De acuerdo al Tribunal, estas cláusulas violan la Ley de Contratación del Estado.
CLAÚSULAS BENEFICIOSAS EN PAGO DE INTERESES MORATORIOS en contratos con VESA, VESAM y ENERSA según TSC
| Nombre empresa | Contrato | Fecha de contabilización de intereses según contrato | Fecha de contabilización de intereses según Ley de Contratación del Estado | Diferencia de días |
| ENERSA | 68/69-2008 | 8 días después de la presentación correcta de la factura. | 45 días a partir de la presentación correcta de la factura | 37 días |
| VESA | 131-2012 | 45 días de gracia sin recargos para el pago, pero una vez pasado este período se calculará interés desde 10 días de la presentación correcta de la factura | 45 días a partir de la presentación correcta de la factura | 35 días |
| VESAM | 136-2012 | 45 días de gracia sin recargos para el pago, pero una vez pasado este período se calculará interés desde, 10 días de la presentación correcta de la factura | 45 días a partir de la presentación correcta de la factura | 35 días |
Hasta septiembre de 2020, la deuda de la estatal con VESA, VESAM y ENERSA ascendía a $67 millones.
Siguen las tarifas caras y los apagones. Irregularidades e impunidad
“Estos proyectos tienen seis años de operar, pero mire, nosotros seguimos teniendo fuertes apagones energéticos y pagando tarifas caras. La situación eléctrica del municipio es deprimente. Parece que de nada sirve tener grandes parques de generación si la comunidad no se beneficia con energía de calidad”, reconoció el secretario municipal de San Marcos, Carlos Molina. La historia de ese pueblo se repite en todas las regiones del territorio donde se han instalado proyectos de generación.
Mario Rubén Zelaya, analista en temas energéticos, explicó que la aprobación de contratos dañinos para las finanzas de la ENEE hace que el presupuesto para el mantenimiento del sistema de transmisión se reduzca, causando apagones constantes.
Asimismo, para el expresidente del Banco Central de Honduras, Hugo Noé Pino, urge revisar los contratos para readecuar la deuda. “La política de contratar energía privada ha estado mal diseñada porque ha registrado pérdidas para la ENEE y para las finanzas nacionales”.
La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) denunció ante el Ministerio Público que uno de los contratos firmados con la térmica ENERSA, registró ilegalidades que podrían causar un daño financiero de $300 mil anuales.
En 2009, EMCE, otra térmica de este grupo, registró problemas con una planta de generación ubicada en Choloma, Cortés, impidiéndole cumplir con su obligación contractual con la ENEE. De acuerdo a otra auditoría del TSC, EMCE propuso que ENERSA, supliera la energía faltante hasta que se solventara el inconveniente.
Las autoridades de la ENEE aceptaron la propuesta, a pesar que según el TSC, ENERSA, no tenía la capacidad para producir esa energía.
Finalmente, después de escuchar las versiones de los involucrados, los auditores del TSC concluyeron que, este caso generó un perjuicio económico de más de 4 millones de lempiras.
De todas las generadoras, a las que más paga la ENEE, son a las térmicas, entre enero de 2019 y julio de 2020, canceló $495 millones, de los cuales 280.8 fueron para las térmicas EMCE y ENERSA del Grupo Terra.
Los programas sociales no compensan las exoneraciones y el beneficio que sacan las empresas privadas de los contratos de energía
Según la Secretaría de Finanzas, la industria energética se lleva gran parte del gasto público. En 2019 el Estado dejó de recibir por concepto de exoneraciones $1,700 millones, de los que $203.2 millones corresponden al área energética.
Las exoneraciones obligan a las empresas beneficiadas a implementar proyectos sociales en las zonas donde operan. Molina reconoce que los representantes de las generadoras eólicas sí han realizado programas sociales, pero que ellos no compensan lo que ganan por funcionar en la región.
“Llevan operando cerca de seis años. Nosotros sabemos que han realizado electrificaciones y pavimentado tramos carreteros, solo apegados a lo que les dicta la ley, pero el municipio necesita más. Lamentablemente sabemos que no hay forma de que ellos hagan proyectos más caros”, comentó Molina.
“Las exoneraciones a las empresas no son justas porque ellos son de los que más ganan y el servicio que brindan no se traduce en disminuciones a la tarifa final. Cada vez que el Estado da exoneraciones, renuncia a cobrar impuestos, dejando menos dinero para educación y salud”, concluyó el economista Claudio Salgado.